Utiliza elementos que recuerden al mar. Hay muchísimos complementos que puedes utilizar para dar ese toque marinero: estrellas de mar, conchas, arena, anclas, redes, barcos, tablas de surf, coral, peceras, caracolas, troncos, flotadores y un largo etcétera.

Si celebras tu ceremonia en una masía o hacienda, puedes utilizar unas tablas de surf para dar la bienvenida a tus invitados escribiendo un bonito mensaje sobre ellas. Seguro que los sorprendes  Y si te apetece, también puedes usarlas para el seating.

Utiliza gasas, tul y telas ligeras para decorar el pasillo hacia el altar y tonalidades azuladas que recuerdan al mar. Y por supuesto, si tu boda es civil, tienes la oportunidad perfecta para celebrar la ceremonia de la arena. Si no la conoces, no te preocupes porque tengo pendiente escribir un post contándotelo.

Como siempre digo, una boda no es una boda sin los novios, así que aquí vengo cargada de ideas para nuestro look.

Cuando imagino una boda en la playa, veo a una novia sencilla, sin demasiados artificios, con el pelo a ondas suelto o semirecogido y con un vestido ligero, sensual, que muestra la figura de nuestro cuerpo. ¿Y tú como te la imaginas?

Y para completar el look playero, decora el seating, las mesas, el photocall y el candy bar con caracolas, estrellas, redes y todo lo que os recuerde al mar. Además, una forma muy elegante de hacerlo es utilizando sombreros para hombres y pamelas para mujeres, abanicos de tela a rallas marineras o gafas de sol con un toque vintage.

Un elemento que nunca falla es recurrir al turquesa, celestes y azules pasteles. Puedes introducirlo en la decoración de las mesas en forma de servilletero, velas, mantelería o incluso en la papelería.